Al compás
tropical
Un clima
de sol pero con pequeñas nubes
En un ambiente calmo y de gran humedad en el
Estadio Maracaná de Río de Janeiro, se vivió el partido entre Argentina y
Bosnia y Herzegovina, a las 19 horas el Domingo 15 de Junio de 2014.
El Maracaná, con una capacidad de 75.000
personas, fue fundado el 24 de Julio 1950 y se ubica en la zona Norte de la
ciudad de Río de Janeiro. Su apodo se debe a una especie de ave típica del
área, por la cual se denominó al estadio con este nombre y el mismo caso
sucedió con el barrio en el que está situado éste. En fin, la selección
argentina tuvo la oportunidad de disputar el partido de la primera ronda del
grupo F frente a Bosnia y Herzegovina, que no había participado del mundial
anterior. Cuando los aficionados esperaban con ansiedad el inicio del juego,
salieron ambos jugadores de cada equipo y empezaron a “pelear por la victoria”.
Se observó una anotación en contra del
jugador bosnio Kolasinac , lo cual llevo a que la “albiceleste” vaya ganando 1 a 0. Así, pienso que los
jugadores argentinos se descuidaron un poco cuando pensaban que era un equipo
fácil, guiados por ese hecho. Durante el primer tiempo, predominó como figura
el arquero de nuestra selección Sergio Romero, quien se mantenía firme con su barco
a pesar de las tormentas que traían los delanteros oponentes. Me pareció un
espacio muy dinámico y uniforme, debido a que los jugadores de sendos equipos
llevaban y sacaban la pelota de su campo muchas veces, por lo cual hubiese
querido más acción por parte de los futbolistas argentinos.
Pasado el entretiempo, los competidores
argentinos se mostraron de una manera más poderosa mientras iban atacando y
defendiendo de una forma más continua.
La
felicidad del pueblo celeste y blanco se amplió cuando Lionel Messi favoreció
al equipo; el 10 realizó una jugada que consistió en que después de un pase,
pasara y esquivara a los defensores contrarios a su grupo. Hubo mucha
individualidad de juego en cada futbolista de nuestro equipo, a pesar de la
próspera coordinación de pases dada en éste.
De repente y posteriormente a que ganara el
conjunto 2 a
0, el delantero bosnio de apellido Ibisevic se dirigió hacia la izquierda y los
defensores habían “quedado varados” en una isla cuando efectuó el primer gol a
favor de Bosnia y, hasta el final de partido, se pudo ver un sufrimiento en la
tribuna, aunque la selección se mantenía ganadora parcialmente.
Al finalizar el encuentro, el director
técnico del equipo celeste y blanco,
Alejandro Sabella se refirió rápidamente a algunas opiniones; explicó
que “la selección tembló”. Sin embargo agregó que estaba “contento con el
resultado”. Una de las dos figuras –en mi opinión- prosiguió con este hilo y
confesó que “estaba nervioso”, “Sabía
que iba a ser así”- añadió “La Pulga Messi”.
En
conclusión, se vio un partido “sin inconvenientes”, ya que los árbitros y
jueces de línea desempeñaron su cargo con equilibrio, cobrando con justicia las
escasas faltas que se produjeron. No se pudieron contemplar algunas jugadas
regulares de Argentina entre las cuales se encontraban centros mal efectuados,
pases largos cubiertos por la defensa, cabezazos a cualquier dirección y la
difícil tarea de pasar la gran defensa perteneciente a la selección Bosnia, a
pesar de que se ocasionó mucha confianza entre los jugadores. No concuerdo con
que hayan tenido que relajarse algunos jugadores en el transcurso del primer
tiempo, creo que no debemos prejuzgar a cualquier rival por experiencias
anteriores.
De
todos modos y como anteriormente lo aclaré,
me pareció buena la organización del equipo en cuanto a los pases
efectuados, sus ataques y defensas. Sin embargo, hubo algunos errores internos
en cada táctica. No obstante, comprendo que estas faltas se evidencian en
cualquier partido.
Damián Kohan