Manuel Belgrano:
Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano nació en Buenos Aires el 3 de junio de 1770. Fue un intelectual, economista, periodista, político, abogado y militar de las Provincias Unidas del Río de la Plata, actual Argentina. ESTUDIOS: El joven Belgrano estudió en el Colegio de San Carlos y luego Derecho en las Universidades de Salamanca y Valladolid (España). En 1793 Belgrano se recibió de abogado y en 1794, ya en Buenos Aires, asume a los 23 años como primer secretario del Consulado. VALORES : El amor al orden, respeto por la religión, moderación y dulzura en el trato, sentimientos de honor, amor a la verdad y a las ciencias, horror al vicio, inclinación al trabajo, despego del interés, desprecio de todo lo que tienda a el comer, vestir y demás necesidades de la profusión y al lujo en la vida y un espíritu nacional .
OBRAS: Luego de unos años comenzó a pensar en la libertad de las colonias Americanas y por sus ideas de independencia paso a ser algo que nunca había estudiado: militar.
Belgrano protegió las costas del Río Paraná con sus baterías LIBERTAD e INDEPENDENCIA y enarboló una bandera creada por él con la intención de distinguirse de los Españoles. También organizó el éxodo jujeño y triunfó en las batallas de Tucumán y Salta. Para Belgrano la educación de hombres y mujeres de todas la condiciones sociales era muy importante. Luego de la Victoria en Salta, la Asamblea del año XIII lo recompensó con 40.000 pesos, que él donó para la construcción de cuatro escuelas. LEMA: “Laisser faire, laisser passer” (Dejad hacer, dejad pasar)
Brigadier Estanislao López:
El brigadier general Estanislao López nació en Santa Fe el 26 de noviembre de 1786.
Fue un caudillo ymilitar federal argentino, Gobernador de la provincia de Santa Fe entre 1818 y 1838. ESTUDIOS: Se educó en la escuela de los padres franciscanos, a la vera del arroyo El Quillá, hasta los catorce años, y a los 15 años salió de ellas para trasladarse a la frontera del Norte en calidad de soldado. Muy joven fue hecho cadete, calidad en la que permaneció largos años.
VALORES: Justicia, paz, amor, humildad, nobleza, libertad. OBRAS: Durante su gobierno recibió una herencia de tres escuelas en Santa Fe: la de los Padres Franciscanos, la de los Mercedarios y la de los Padres Dominicos; además de la construcción en San Lorenzo y la de Rosario con actividad discontinua. Estas escuelas funcionaban con esfuerzos, merced al apoyo de familias santafesinas. Y en cambio nos dejó, como legado además de las nombradas perfectamente consolidadas, la de San Antonio, la escuela Principal, la de Niñas y dos institutos, el Gimnasio Santafesino y el Literario San Jerónimo, todos ellos en la ciudad capital; y en el interior las escuelas de Rincón, Coronda y Sauce. También atendió fundamentos económicos en materia educativa: * Buena remuneración docente.
* Educación gratuita y otorgamiento de becas, consideradas en los postulados de la política educativa, pues era preocupación de López que toda la juventud se instruyera.
* Provisión de material didáctico y de útiles escolares a los educandos.
* Construcción y equipamiento de edificios escolares.
Conocía y valoraba el poder de la prensa, bajo su gobierno, restaurada la primera imprenta, se publica El Federal.
López hizo sancionar la constitución provincial de Santa Fe, la primera del país.
LEMA: “Lex populi, Lex dei” (la ley del pueblo es la ley de Dios).
La sociedad en esa época: A lo largo delos siglos XVII y XVIII, las ordenes de la Colonia española se obedecían cada vez menos en América. La disposiciones del rey tardaban mucho en llegar a las colonias: las distancias eran enormes y los medios de comunicación, muy lentos. Además, no era sencillo hacerlas cumplir en un territorio tan extenso. Cada año, las colonias enviaban a España menos oro y plata, ya que se empleaba en la defensa y la administración americana. La corona también temía que algunas potencias enemigas de España, principalmente Francia, Inglaterra y Portugal, quisieran adueñarse de los territorios españoles, ya que no estaban adecuadamente defendidos.
Para defender mejor el territorio y resolver algunos problemas,
en 1776, se creó el Virreinato del Río de
la Plata con Buenos Aires como su capital. Esto favoreció no sólo el crecimiento de la ciudad de Buenos Aires, sino que también incrementó la actividad comercial entre la ciudad y Potosí.
En la época colonial, había grandes diferencias entre los distintos grupos sociales.
UNITARIOS Y FEDERALES:
Los criollos no podían ponerse de acuerdo sobre como organizar el país, y la sociedad quedó dividida en unitarios y federales. La mayoría de los unitarios pertenecían a los grupos más instruidos de la sociedad. Este grupo sostenía que era necesario centralizar todo el poder en la provincia de Buenos Aires.
En cambio, los federales, defendían una forma de gobierno que otorgaba a los habitantes de las provincias la facultad de elegir sus autoridades y de dictar sus propias leyes.
Diferencias y similitudes entre la sociedad actual y la sociedad de esa época:
En los tiempos de la revolución la sociedad estaba muy dividida con respecto a las personas. No todos tenían los mismos derechos ni las mismas posibilidades. Nuestros próceres lucharon por las mismas oportunidades para todos, y soñaron con que la humanidad, en el futuro, sea más justa.
En la actualidad, la sociedad, recuerda a estos próceres por sus grandes actos, pero también hay que recordarlos por sus principios y sus valores.
La sociedad en estos tiempos no está dividida como antes, pero sí existen pequeñas acciones en las cuales las personas no son valoradas por ser ellos mismos.
Cerca del siglo XVII éramos gobernados por los españoles, que nos manipulaban a su conveniencia. Ellos sólo pensaban en el bien de su nación.
En la actualidad, Argentina, es libre. Puede tomar sus propias decisiones, crear leyes, etc. Pero no somos tan libres como parece ya que todos los días estamos expuestos a varios peligros. Estos riesgos son causados por el hombre. Las personas que exponen a la sociedad en ese peligro sólo piensan en ellos mismos, como los reyes en el siglo XVII.
Los próceres de nuestra patria lucharon por un buen futuro. Dieron lo mejor de cada uno sin pensar en una recompensa. Por esta razón nosotros, la futura humanidad, debemos aprender de ellos, tomarlos como ejemplos y no a las personas que exponen a la sociedad en peligro. Todos somos iguales, tenemos los mismos derechos y todos debemos luchar, desde nuestro lugar, como lo hicieron nuestros antepasados por el mejor futuro.
Agostina Marmirolli